A la hora de renovar los colchones de casa llega una de las temidas preguntas ¿cuál es mejor para descansar? Hoy nos vamos a centrar únicamente en los colchones de resorte y espuma, te contaremos en qué consiste cada uno y qué cualidades os pueden aportar para vuestro descanso.
Comprar un colchón es toda una inversión de dinero pero ¿es necesaria? Hay ocasiones en las que no nos da el presupuesto para comprar un colchón de grandes prestaciones y, a su vez, hay otras ocasiones en las que no se trata de si hay presupuesto o no, es que son para una segunda o tercera residencia por lo que no siempre se ve necesario invertir tanto dinero. Para estas situaciones, entre la gama de colchones baratos vamos a destacar los colchones de resorte y los colchones de espuma como dos opciones a valorar.
Colchones de resorte
Los colchones de resorte son aquellos que están formados por resortes o muelles y, sobre estos, se coloca una capa de algún material que amortigüe el contacto directo del cuerpo con el mismo. Para terminar, sobre dicho material irá una tela.
Algunas de sus características principales son:
- Aporta una gran firmeza y mayor durabilidad siempre que se sigue un mantenimiento óptimo.
- No transfiere el movimiento, por lo que es estupendo para aquellos que duerman en pareja y ya sepan que se mueven mucho.
- Se puede colocar, o no, sobre una base tapizada.
- Al estar fabricado con resortes y haber espacio entre estos favorece que haya mayor circulación de aire, por lo que la posibilidad de humedad en el interior del colchón es mínima.
- Estos colchones pueden resistir en buenas condiciones mucho peso, aunque también es importante mencionar que hay colchones específicos.
- En cuanto al precio están considerados como los más baratos del mercado.
Colchones de espuma
Como primer punto fundamental: la densidad y la calidad de la espuma afectará directamente a la posibilidad de un buen descanso. Dentro de tu presupuesto, si puedes, opta por los colchones de espuma con memoria frente a los de toda la vida puesto que son más densos.
Los colchones de espuma se caracterizan porque se adaptan mucho al cuerpo, por lo que suele resultar cómodo. La diferencia entre el de espuma de memoria y el tradicional es que el de memoria volverá a su forma original, lo que implica que no se deforma.
Los colchones de espuma con memoria favorecen que el peso del cuerpo se distribuya por todo el colchón, lo que favorece que no haya rigidez ni puntos de presión concretos que puedan derivar en dolores físicos.
Una de las ventajas que aporta frente a otro tipo de colchones es que, aunque uno se mueva en la cama, no transfiere el movimiento, por lo que es una buena opción para parejas. Además, no requiere que lo vayas girando de forma habitual para que no coja formas, si no que un buen mantenimiento solo va a requerir que lo voltees de dos a tres veces al año.
En cuanto al precio, un colchón de espuma tradicional es más barato, el de alta densidad o de memoria requiere un poco más de presupuesto pero puede compensar ese extra de dinero por sus beneficios para el descanso.
¿Cuál es mejor para descansar?
Ante esto, la verdad, es que no hay una respuesta correcta. Todo depende de qué aspectos son los que más os gustan para poder dormir, puesto que algunos prefieren los colchones blanditos como la espuma y otros prefieren la firmeza. A su vez, también será importante que valoréis el resto de características, puesto que la durabilidad es un factor importante para que sea una inversión que merezca la pena.
